El estadio Mary Terán de Weiss lagrimeó este domingo. No era un partido más, la presencia de Novak Djokovic así lo demostraba. Era la despedida de un ídolo, el adiós de Juan Martín Del Potro del tenis profesional. Las 15.000 almas que colmaron las gradas del Parque Roca fueron testigos de un encuentro cargado de emociones, en el que el resultado quedó en segundo plano. Lo importante era celebrar la trayectoria de un jugador que supo ganarse el corazón de los argentinos con su garra, su talento y su humildad.
Figuras del deporte como Gabriela Sabatini y Gisela Dulko se sumaron a la fiesta, para jugar un partido de dobles junto a Delpo y Nole durante la exhibición. El ambiente era de pura celebración, con un público que no paraba de ovacionar a Delpo en cada punto.
Tras el partido, las palabras del serbio y un video que contenía saludos de sus grandes rivales y amigos en el circuito, el mejor tenista del país desde Guillermo Vilas hasta la fecha habló ante el estadio repleto, o al menos lo intentó mientras la emoción se lo permitió. “Ay Dios, qué difícil”, sostuvo apenas tomó el micrófono y segundos después de que se reprodujeran las imágenes que lo conmovieron, con saludos de la talla de Emanuel Ginóbili, Lionel Scaloni, Roger Federer, Rafael Nadal, Martín Palermo y Carlos Alcaraz, entre otros.