Hugo Orlando «El Loco» Gatti, uno de los arqueros con más historia en el fútbol argentino y creador de la atajada denominada «la de Dios», murió este jueves a los 80 años luego de permanecer en terapia intensiva y en estado irreversible en los últimos 60 días.
«La Conmebol lamenta profundamente el fallecimiento de Hugo Orlando Gatti, leyenda del fútbol sudamericano. Condolencias a familiares y amigos», expresó en X la matriz del fútbol sudamericano.
«Adiós colega (si me lo permite)», posteó el presidente Javier Milei.
«El Club Atlético Boca Juniors lamenta profundamente el fallecimiento de Hugo Orlando Gatti, ídolo eterno y multicampeón Xeneize. ¡Hasta siempre, Loco!», lamentó, por su parte, Boca Juniors en su cuenta en X.
Gatti murió cerca de las 17.30 horas de este domingo después de dos meses internado en el Hospital Pirovano por un cuadro de neumonía. El último parte médico indicó que padecía un cuadro de «neumonía e insuficiencia cardíaca y renal» por lo cual se le había inducido a un «coma farmacológico«.
La familia del exfutbolista decidió quitarle el respirador este domingo porque su estado de salud era ya irreversible, según el pronóstico médico.
Gatti viajaba habitualmente entre Argentina y España, donde vivía desde hace años, pero no le gustaba el frío, así que este año volvió a su país natal, donde hace dos meses sufrió una caída que le provocó una fractura de cadera.
Fue internado en la Ciudad de Buenos Aires y tras la cirugía su estado se complicó al contraer un virus hospitalario que derivó en una neumonía y una insuficiencia renal. El viernes 28 de marzo se le practicó una traqueotomía.
Gatti fue portero de Atlanta, River, Gimnasia y Esgrima La Plata, Unión y Boca Juniors y ostenta el récor de partidos disputados en la primera división argentina, 765 a lo largo de 25 años de carrera, entre 1962 y 1988. También tiene el récord de penales parados entre los arqueros argentinos, con 26, incluido el que le desvió a Vanderlei (Cruzeiro) y le dio a Boca su primera Copa Libertadores en 1977.
Gatti, que en los últimos años ejerció como panelista en programas deportivos de España, como «El chiringuito de jugones», había sido operado hace poco menos de un mes de la cadera por un accidente mientras paseaba a su perro. Unos días después su cuadro se agravó debido al ingreso de una bacteria a través de su cadera, lo que le provocó un cuadro respiratorio agudo.
Gatti ya había estado muy grave en 2020, año en el que se contagió de coronavirus, aunque luego de su recuperación bromeó y afirmó: «Me han matado en todos lados, pero yerba mala nunca muere».